Docentes y padres cada vez somos más conscientes de la importancia de educar en las emociones. Hay cuatro áreas en las que la falta de inteligencia emocional en la escuela puede desarrollar problemas en los niños y adolescentes:
Los estudiantes que desarrollen una buena inteligencia emocional son capaces de percibir su estado anímico, comunicarlo y ofrecer a los demás esta información. Además, serán capaces de observar ese estado en los otros, es decir, extrapolar este conocimiento. Esto hará que las relaciones se establezcan sobre cimientos sólidos y que sean capaces de ponerse en el lugar del otro. La falta de inteligencia emocional puede derivar en acoso, maltrato y abusos. Y sin ir tan lejos, en relaciones meramente superficiales en las que no se desarrollen valores y se pierda las gratificaciones que el cultivo de una amistad aporta.
El conocimiento y manejo de las emociones proporciona un mayor bienestar, autocontrol y optimismo vital. Los alumnos se enfrentan mejor a situaciones estresantes y afrontan los retos con mayor calma. El aprendizaje se convierte en un camino más interesante ya que los errores se transforman en oportunidades de mejora. La tolerancia a la frustración evita que se pueda caer en actitudes derrotistas o bien agresivas.
Los estudiantes que no son capaces de conocer sus emociones y carecen de habilidades para regular sus emociones tienen más probabilidades de desarrollar depresiones.
La capacidad de afrontar el estrés y gestionar las emociones en general hace que los alumnos presenten una mayor capacidad para asimilar conceptos. Además, son capaces de trabajar en equipo con el enriquecimiento que esto conlleva ya que el manejo de las habilidades sociales les permite la resolución de conflictos de una forma adecuada.
Los alumnos con bajos niveles de inteligencia emocional presentan cuadros de mayor impulsividad que pueden dar lugar a conductas agresivas. Además la regulación de las emociones permite gestionar los retos de la adolescencia evitando la búsqueda de reguladores externos. Esto permite a los jóvenes que se enfrenten a las dificultades propias de esta etapa sin recurrir al consumo de drogas legales o ilegales para anestesiar el dolor, la incertidumbre o el vacío.
Os dejamos un póster para imprimir y poner en la clase, así todos podemos tener presentes en todo momento los pasos para resolver los conflictos DESCARGAR PÓSTER : poster-resolucion-conflicto